La piel bronceada puede ser hermosa, pero pasar demasiado tiempo bajo el sol puede envejecerla más rápido, lo que se conoce como fotoenvejecimiento o incluso se corre el riesgo de desarrollar cáncer a la piel.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 20 minutos al día son suficientes para absorber niveles adecuados de vitamina D. Sin embargo, el momento depende de diferentes factores, como la estación del año, la hora del día, la edad y el tipo de piel.
Los cosméticos bronceadores son aplicados para darle a la piel un tono canela oscuro. En ocasiones el color puede ser removido con agua y jabón y otras veces desaparece en unos pocos días. Pero, en ningún caso, estos productos son aptos para proteger la piel contra el sol. No resulta conveniente utilizar lámparas de rayos ultravioletas ni camillas bronceadoras. Examine su piel regularmente en busca de señales de cáncer de la piel Observe cambios en el tamaño, forma, color o volumen de lunares, verrugas, manchas en la piel o marcas de nacimiento. Si nota algún cambio o tiene partes doloridas que no sanan, consulte a su médico lo antes posible. Además:
- Observe alrededor de su nuca y su cuero cabelludo con la ayuda de un espejo.
- Examine su cuerpo en el espejo tanto de frente como de espalda y a ambos lados.
- Doble sus codos y observe debajo de su brazos.
- Mire la parte posterior de sus piernas y sus pies.
Use protector solar
Los protectores solares son productos de uso externo que contienen sustancias físicas y/o químicas que actúan como barrera protectora de la piel a las radiaciones solares. Constituyen una defensa de primera línea, siempre que reúnan condiciones necesarias de ecacia, seguridad y calidad. Estos productos son clasicados según el Factor de Protección Solar (FPS), que identica la protección que ofrece contra los rayos UV, acorde al tipo de piel. A mayor número de FPS, mayor protección.
Es importante la elección del factor de protección a utilizar para el rostro y el cuerpo teniendo en cuenta el tiempo de exposición. Además, el hecho de conocer el tipo de piel ayuda a escoger el producto adecuado. En la cara posterior del embalaje deberá constar la explicación del factor de protección solar del producto.
Generalmente, conviene utilizar un protector solar con un FPS 15, como mínimo, y tener en cuenta lo siguiente:
– Aplicar el protector solar en la piel 30 minutos antes de exponerse al sol.
– No olvidar colocarse el protector solar aún en las partes sensibles como partes calvas de la cabeza, orejas, cuello, nariz, empeines de los pies y manos.
– Usar también protector labial.
– En caso de niños menores de 6 meses, consultar con el médico sobre la conveniencia de su aplica- ción.